5 de mayo de 2017. Anoten esta fecha, amigos, porque hoy se ha hecho historia en los cielos de Shanghái. El Comac C919, la respuesta de China al Airbus A320 y al Boeing 737, ha tenido su primer vuelo. Con los datos de Flightradar24, (coordenadas 31.122849,121.830246 a 135 nudos, ascendiendo hasta 9800 pies y hasta 208 nudos) ha sido como presenciar el nacimiento de algo monumental. Esto no es solo un avión despegando, es una nación reclamando su lugar en el mundo de la aviación comercial.
Punto de Inflexión Histórico
Pongamos esto en perspectiva. Durante décadas, el mercado de los aviones comerciales ha sido un duopolio cómodo entre Airbus y Boeing, que lo han dominado, produciendo A320s y 737s como churros, transportando a millones de pasajeros por todo el mundo. Estos aviones son los más usados en las rutas de corto y medio alcance, que son los vuelos que mantienen sanas las cuentas de las aerolíneas. Y ahora se quiere unir el Comac C919 a la fiesta.

No se trata solo de construir un avión, el C919 representa una ambición nacional no solo de participar en la aviación global, sino de liderarla. Pero no nos adelantemos, el vuelo de hoy ha sido el primero de muchos, un pequeño paso en una maratón que es de las más duras que existen.
Certificar un nuevo avión comercial es una tarea titánica. Este primer vuelo, aunque un triunfo, es solo el inicio. El C919 deberá soportar innumerables vuelos de prueba, llevando sus sistemas al límite: pruebas de pérdida, operaciones a gran altitud, condiciones climáticas extremas, lo que se les ocurra, es una empresa nueva en esto y tiene que ganarse la confianza de los reguladores. Como se ve en los datos de Flightradar24 han hecho un ascenso cauteloso, alcanzando un máximo de 9800 pies y 208 nudos, pero las pruebas futuras exigirán mucho más. Cada tornillo, tuerca y línea de código será examinado para garantizar que cumpla con los estrictos estándares de seguridad de las autoridades aeronáuticas. Por ahora, Comac se centra en la certificación en China, donde la Administración de Aviación Civil de China (CAAC) pondrá al C919 a prueba. Pero el verdadero premio está más allá de las fronteras asiáticas.
En unos años, Comac apuntará a Estados Unidos y Europa, donde la Administración Federal de Aviación (FAA) y la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA) imponen algunas de las regulaciones más estrictas del mundo. Estas agencias no se andan con juegos: Boeing y Airbus han gastado miles de millones navegando por sus requisitos laberínticos. Para Comac, un recién llegado, el desafío será inmenso. Un solo error, un defecto pasado por alto, y las ambiciones globales del C919 podrían quedar en tierra. A los constructores de aviones “clásicos” se les pueden pasar algunos errores, ya que han estado fabricando aviones desde hace décadas y han demostrado que pueden fabricar aviones de alta calidad, pero a un constructor nuevo como Comac le costará mucho más.
Especificaciones Técnicas del Comac C919
Ahora es cuando me pongo un poco friki y hablo de especificaciones. El C919 es un avión de fuselaje estrecho, de pasillo único, diseñado para transportar entre 158 y 168 pasajeros, dependiendo de la configuración, con un alcance máximo de entre 4075 km a 5555 km. Está propulsado por dos motores CFM International LEAP-1C, los mismos motores de bajo consumo que equipan algunas variantes del A320neo y del 737 MAX. Estos motores consumen menos combustible, reducen emisiones y mantienen los costos operativos bajos, algo que cualquier aerolínea agradece. Este avión está fabricado en China con cooperación de fabricantes internacionales de Estados Unidos y Europa.

Según datos oficiales, el avión mide 38.9 metros de largo, con una envergadura de 35.8 metros y una altura de 11.95 metros. Su peso máximo al despegue ronda los 77,300 kg, y cruza a Mach 0.785 (unos 975 km/h). La cabina cuenta con un sistema fly-by-wire moderno y una cabina de cristal con cinco pantallas multifunción grandes, lo que lo pone a la par con sus rivales occidentales. Comac también ha colaborado con gigantes globales como Honeywell, Rockwell Collins y Safran para los sistemas de aviónica, tren de aterrizaje y otros componentes críticos, combinando la innovación china con la experiencia internacional probada.
¿Para quién es el C919?
Como detalle curioso, con ciudades como Pekín, Shanghái y Cantón viendo un crecimiento enorme en el tráfico aéreo, el C919 está hecho a medida para conectar estos megacentros. Pero vaya, que este avión no es solo para China, Comac tiene la mira puesta en aerolíneas internacionales, especialmente en Asia, África y otras regiones donde las aerolíneas con presupuestos justitos y sin industria propia podrían sentirse tentadas por una alternativa más económica a Airbus y Boeing.
Es un avión sin probar, y sí, enfrentará escepticismo. Las aerolíneas y los pasajeros occidentales podrían dudar en confiar en un avión chino al principio. Yo me subiría sin pensarlo dos veces, la verdad. La idea de volar en un avión así me encanta, pero entiendo que a la gente le cueste aceptar un avión de un fabricante nuevo.
Mapa del vuelo
Antes de que los datos de Flightradar24 se borren, he descargado el CSV de la web y lo he subido a mi servidor. Aquí debajo puedes descargar el archivo: